Raíces de España tiene un nombre ganado en las artes pineras, tras un parto exitoso que tuvo en Elena Pestana Sáez a la progenitora, feliz en sus setenta años en un regreso que la puso en contacto con una nueva generación de jóvenes que hoy integran la compañía folkórica que ella fundara en 1992: “Comencé este proyecto con 51 años, fue un parto tardío, pero al final le hice cesárea y se logró”, declaración de Elena, sonriendo, llena de emociones, en una charla en el patio de la UNEAC.
“El reconocimiento que me han dado es muy importante porque a mi edad no veo las cosas igual. Necesito cariño, amor, y esto es lo más grande que podían haberme hecho”. Elena, quien recibiera clases de baile en su juventud y llegara a graduarse en la Sociedad Andaluza, en un homenaje sencillo, pero lleno de re-encuentros, recibió en la noche la Medalla Raúl Gómez García que entrega el Sindicato de la Cultura y la Orden Pablo Porras Gener, que entrega la UNEAC, de manos de Miguel Ángel Cordero, Director de Cultura en la Isla, y José Rodríguez Pantoja, Pepe, Presidente de la UNEAC en tierras pineras.
Elena, que llegó con las tres heridas que todos llevamos –la de la vida, la de la muerte, la del amor– se llenó de luz y cariño, del bien que todos los pineros siempre tenemos para recibir a los amigos, esos buenos que siempre regresan con la virtud de tener a la Isla en el centro del pecho.
Elena, siempre hermosa, sembró, y siembra, porque ella es de las que hacen realidad los mejores sueños de esta tierra.
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